La cocina es un campo tan amplio que permite experimentar cientos de cosas distintas. Cada día se inventan nuevos platos jugando con los ingredientes, con contrastes y sabores que proporcionan sensaciones únicas en el paladar de quien los prueba. Esta receta es una idea maravillosa para si tienes una sociedad gastronómica y quieres ofrecer una alternativa que llame la atención y que cause sensación.
El secreto de este plato es la combinación y explosión de sabores tan distintos como el del garbanzo y el del membrillo. Es un plato algo arriesgado porque tiene tantos seguidores como detractores, así que asegúrate bien de quién se lo va a comer antes de sorprender.
La ensalada de garbanzos es un plato que podrás ver en muchas zonas del levante español, en la que se combinan muchos ingredientes de huerta para crear un plato fresco, saludable y ligero. Con la adición del membrillo podemos hacerla más calórica y apropiada para periodos de entretiempo.
Ingredientes de la ensalada de garbanzos con membrillo
- 1 cebolla picada.
- 100g. de membrillo cortado en dados.
- 1 pimiento pequeño cortado en tiras.
- 60g. de atún en conserva.
- 200g. de garbanzos cocidos (los de bote sirven perfectamente).
- Sal y vinagre a gusto.
- Aceitunas negras.
- Aceite de oliva virgen extra.
Preparación del membrillo con garbanzos
- Tomamos los garbanzos cocidos y los lavamos con agua fría.
- Añadimos todos los ingredientes menos el membrillo y los mezclamos para que todos los sabores se mezclen.
- Echamos finalmente los trozos de membrillo. También podemos dejarlos separados por si algún comensal no quiere o no se atreve con esta mezcla.
La receta es ligera pero el membrillo la hace algo más densa de lo normal. Es importante tener esto en cuenta a la hora de pensar el resto del menu.